El ejercicio y la actividad física aportan múltiples beneficios para la Salud, el Bienestar y el rendimiento, sobretodo si se sigue un programa de ejercicio y nutrición específicamente ajustado a las características, las necesidades y los objetivos personales. Pero... ¿cuáles son estos beneficios exactamente?
Por otra parte, prestigiosos estudios recomiendan la actividad física como tratamiento complementario o alternativo a otros tratamientos médicos o psicológicos. Resulta más económica, menos invasiva, y presenta menos efectos secundarios. En China, por ejemplo, millones de personas prescinden de la medicina occidental gracias a sus técnicas milenarias: entre ellas los ejercicios de Qi-Gong.
Se ha demostrado que diversas patologías cardiovasculares, hormonales, respiratorias, del sistema musculo-esquelético, psicológicas y muchas otras tienen en la actividad física un aliado no solo para su prevención, sino también para su tratamiento. Combinar ejercicio con una dieta saludable es una de las mejores formas de ganar en salud.
Más Bienestar: La sensación de bienestar se incrementa al realizar ejercicio. Esto es debido al incremento en la producción de hormonas (endorfinas) que se activan e incrementan de por sí simplemente al realizar una actividad física de cierta intensidad.
Al realizar ejercicio al aire libre obtendremos una activación extra de estas sustancias al vivir momentos únicos y experimentar sensaciones estimulantes: ¿quién no siente una profunda emoción positiva al contemplar una puesta de sol o grandes espacios naturales?... es lo que algunos autores denominan "EcoTerapia". Los niveles de serotonina, una hormona asociada al bienestar, se incrementan simplemente con la exposición a la luz solar.
Por otra parte, al lograr tus objetivos progresivamente y constatar los cambios que se producirán en tu cuerpo, también en tus emociones y en tu mente, te llevarán a sentirte mucho mejor, a ser más feliz y a vivir más plenamente.
Pero además, varios estudios demuestran que los alumnos con mayor actividad física suelen obtener mejores notas en la escuela. Los adultos que realizan actividad física moderada o intensa suelen rendir más y mejor en el trabajo. Las personas que realizan actividad física, suelen tener un mayor desarrollo de capacidades cognitivas y emocionales: resiliencia, gestión emocional, creatividad, empatía, sociabilidad...
Muchas empresas son conscientes de estos beneficios, y cada vez más incluyen actividad física en los centros de trabajo para mejorar no solo la calidad de vida de sus empleados, sino también para aumentar la productividad y reducir el absentismo laboral por bajas de enfermedad o depresión.
En resumen: El ejercicio físico nos permite mejorar nuestra figura, mantener el peso adecuado y optimizar las funciones corporales; reduce los niveles de stress y ansiedad, mejora la capacidad de atención, la percepción y la memoria; aumenta la fuerza, la resistencia, la coordinación psicomotriz y el equilibrio; estimula positivamente al sistema inmunitario, resulta un complemento terapéutico ideal en muchas de las patologías más extendidas del siglo XXI y es un preventivo eficaz para muchas de las enfermedades más comunes de nuestro tiempo como la obesidad y el stress.